Nunca sabremos cuándo tendremos el último abrazo y el último beso, porque nunca poseeremos una “hoja de ruta”, de esas de las que presumen los políticos, que nos diga cuándo llegará el último día.
No sé si eso nos da derecho a algo, desde luego no nos lo da para molestar más a los demás y menos a los que nos rodean, pero sí creo que nos da derecho para decir LO QUE NOS HACE FELICES.
Soy feliz pot haberte conocido angelito
ResponderEliminar