HAY QUE RENDIR HOMENAJE
Creo que, en algún momento, hemos de rendir homenaje a los que buscan una salida para seguir, aun sabiendo que no la van a encontrar, a los que, a pesar de tener todo en contra y perderse cada día, siguen adelante y a los que, aunque se estén muriendo, viven o lo intentan.
No es fácil recorrer el camino con esa mochila, pero es que hay que ser felices, no como dicen, sino haciendo las cosas que nos hacen felices o del modo en que nos hacen menos infelices.
Siempre pesan muchos los recuerdos y rememorarlos hace que nos de la impresión que “vivimos” o “revivimos” sacando los elementos que se acumulan en nuestra memoria, esos que nos han ido marcando el recorrido. Pero vivir así (o intentarlo) hace que aún distorsionemos más la realidad, por más que, como escribió en su momento GARCÍA MÁRQUEZ. “recordar será fácil para los que tiene memoria, mientras que olvidar es difícil para quien tiene corazón”.
O sea, que recordamos retorciendo la realidad pasada y usando solo de la memoria, pero dejamos aquellas cosas que afectaron a nuestra corazón, con lo que realmente vivimos un mundo virtual sin más impulso que las ganas de vivir, de seguir, de darnos fuerzas nosotros mismos.
En definitiva, seguimos en el torbellino que forman las ideas de los demás, a las que acabamos teniendo miedo, y mostrando poca fe en nuestras propias ideas, que son las que pueden salvarnos.
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