jueves, 31 de enero de 2019

LA DESILUSIÓN PUEDE SER BUENA

LA DESILUSIÓN ES BUENA

A veces la desilusión es buena porque te hace poner los pies sobre la tierra, ver la realidad, dejar la ensoñación.

Todos sabemos que hay una delgada línea entre perder el orgullo y perder la dignidad. El orgullo se pierde cuando no se quiere perder a alguien a quien estimas. La dignidad la perdemos cuando decidimos dejar de querernos, arrastrados por la persona que no nos considera.


Este poema de MIGUEL HERNÁNDEZ nos viene que ni pintado en esta ocasión:

No admito, amigos, no quiero
ese consejo prudente.
Paciencia la suficiente,
pero no la del cordero.
No puedo aceptar un daño,
aunque me llegue de rey,
ni con razón de buey
ni con alma de rebaño.

Aquí estoy para vivir
mientras el alma me suene,
y aquí estoy para morir
cuando la hora me llegue,
en los venenos del pueblo
desde ahora y desde siempre.
Varios tragos es la vida

y un solo trago la muerte.

miércoles, 30 de enero de 2019

REGLAS PARA CAMBIAR LA VIDA

REGLAS PARA CAMBIAR LA VIDA (Fuente)

Muchas personas pasan su vida tratando de lograr objetivos a largo plazo y, mientras esperan que estos se cumplan, lo que pasa es la vida sin pena ni gloria.

Existen, según algunos autores, unas reglas que nos puedes ayudar:



  1. La felicidad no se persigue porque esa se encuentra dentro de ti.
  2. Deja de necesitar del juicio de los demás para aprobarte a ti mismo, repítete lo inteligente y bueno que eres y siéntete satisfecho con ello.
  3. Toma el control de tu vida, sobretodo cuando deseas algo y olvídate de los permisos o las aprobaciones.
  4. ¡Madura! No sólo tengas conocimiento sino también aprende a usarlo.
  5. Deja de querer sacar a todo mundo de tu vida, solo avanza y deja que el tiempo haga lo suyo.
  6. Deja de complacer a todos porque eso es imposible. Al final si lo logras sólo acabarás emocionalmente frustrado.
  7. Siempre paga por los favores hechos, pues no vale la pena que en algún momento te hagan sentir mal o culpable de algo que se supone hicieron por ti.
  8. Sé alguien con grandes cualidades y logros propios para que no te conviertas en alguien que solo sabe hablar mal de los demás.
  9. La depresión es mala, pero peor es reprimir tus emociones, explora tu alma y trata de encontrar eso que te impulsa.
  10. Hablar con los amigos o las personas que nos caen muy bien es agradable pero hablar con tus enemigos enseña más, pues te haces consciente de tus defectos y de cosas que no tenías ni idea de ti mismo y que debes mejorar.
  11. Sólo fantasea con los sueños que puedes lograr y manténlos reales para que nunca pierdas el objetivo.
  12. Leer un libro siempre te beneficiará más que hablar con alguien superficial.
  13. Deja de ver la vida de los demás y enfócate en aquello que te beneficie.
  14. Entiende que tu mayor enemigo eres tú y cuando entiendas eso, cualquier enemigo podrá ser vencido fácilmente.
  15. Olvídate de las críticas, éstas no valen nada cuando estás haciendo todo por lograr tus objetivos.
  16. Sé más extrovertido y no temas relacionarte con los demás, si no te conocen podrán pensar de forma positiva hacia ti.
  17. Grábate el hecho de que la soledad no es mala amiga.
  18. No hay lógica femenina o masculina, solo sabiduría.
  19. Para hacer más grande tu felicidad, compártela con los demás.
  20. Vive por ti y para ti y deja de probarles cosas a los demás, no necesitas de ello para ser feliz.

martes, 29 de enero de 2019

NO MENDIGUES LA ATENCIÓN DE NADIE

NO MENDIGUES LA ATENCIÓN DE NADIE

Con ese título me encontré un escrito hace unos días en algunas de las redes que visito y esa lectura me incitó a algunas reflexiones que quiero dejar aquí, en este blog.

El escrito comenzaba así:

"No mendigues amor o amistad a quien no tiene tiempo para ti, a quien solo piensa en sí mismo. No lo hagas nunca. No te merece quien te hace sentir invisible e insignificante con su indiferencia. Te merece quien con su atención te hace sentir importante y presente".

Y la frase me parece acertada. pues el hecho de tener que rogar amistad es el más fiel reflejo de la injusticia emocional, del desequilibrio que vive el sentimiento que cimienta una relación.

Del texto tomo algunas ideas que me parecen de interés.

Al final las personas que nos merecemos son aquellas que, teniendo la libertad de elegir, se acercan a uno, nos aprecian y nos dedican tiempo y algunos pensamientos. En ningún caso vale como excusa la falta de tiempo, solo existe la falta de interés


Esto es muy importante porque socialmente se tiene la falsa creencia de que el malestar psicológico es signo de debilidad y de que, a la vez, el tiempo curará las heridas sin necesidad de “desinfectarlas” ni de poner vendas o parches para evitar que sangre.

Hay que dedicar tiempo a la gente que se lo merece y que nos hace sentir bien. No hay que mendigar la atención o la amistad de nadie.

Por eso, si vives en una situación de injusticia emocional tan alarmante, recuerda:
  • A quien no te llame y no conteste tus llamadas, no le llames.
  • No busques a quien no te extrañe. No extrañes a quien no te busca. No escribas, no te sometas al castigo de la indiferencia que demuestran mensajes ignorados o silencios infundados.
  • No esperes a quien no te espera, valórate y deja de mendigar y de rogar amistad. Tu cariño debe ser para quienes te quieren y te comprenden sin juzgarte.
  • Y sobre todo no te olvides del valor de tu sonrisa ante el espejo, quiérete y valórate por todo lo que eres y no por lo que alguien que no te merece te hace entender. 

  • Ámate bien y date cuenta de que el hecho de que alguien te descuide no quiere decir que tú no debas hacer lo imposible por rodearte de personas que te quieran en su vida.

lunes, 28 de enero de 2019

CONEXIONES EN LA RED

CONEXIONES EN LA RED

Una de las características de las redes telemáticas es que te permiten conectar con personas, que probablemente nunca conocerías personalmente, pero que tienen pensamientos y escritos en paralelo con los tuyos. Eso ayuda a “afilar” más las entradas y a adentrarte en otros modos de ver o vivir la vida.

Eso me ha pasado con un bloguero (JAIME JORDÁN CHÁVEZ ORDÓÑEZ. En su blog me he encontrado con agradableS sorpresas que me han gustado.

De todas ellas quisiera dejar constancia de dos poemas para la reflexión:


NOSOTROS 
Nacemos nuevamente,
cada día, o cada instante.
Nos hilamos con la memoria,
pero nunca fuimos el que recordamos,
somos el otro, el que ya se fue,
y somos también el que está llegando.
Viajamos, de sueño en sueño
y de paloma en paloma,
con el polvo en nuestras manos,
anónimos, discretos,
y olvidados.

Poesía - inexistente
De todo lo que hagamos,
al final no quedará nada.
Solo huellas que se borran con el tiempo,
Un día ya no quedará nadie que pueda recordar algo,
Por eso la eternidad es tan breve como el hombre,
Somos un parpadeo de un dios inmenso,
nada, nada significamos
nada, nada hemos venido a hacer,
¡Nada! ¡Nada! No somos nada. En polvo nos convertiremos

y del polvo volveremos a nacer.

domingo, 27 de enero de 2019

NO DEBO MÁS QUE LA AMISTAD QUE ME DEPARAN

NO DEBO MÁS QUE LA AMISTAD QUE ME DEPARAN

Creo estar seguro de que no debo nadie a nadie, ni que deba convencer a nadie de nada, excepto, claro está, a ese selecto elenco de amigos que aún me leen y abren la ventana de mi rincón.

A los demás creo que no merece la pena intentar siquiera convencerles, porque jamás comprenderán mi historia, ni mis dificultades, ni el esfuerzo que me cuesta cada día seguir adelante. Por otra parte, tampoco importa mucho, no sé cómo hay que vivir en ninguna circunstancia, supongo que, como todos, voy improvisando cada día.

A veces, con todo, me siento triste porque hay cosas que no puedo contar. Sólo tengo claro que he de seguir adelante y disimular diciendo que todo va razonablemente bien. Pero hay palabras o presencias que echo de menos.



Como decía Rabindranath TAGORE:

Si no me hablas
llenaré mi corazón con tu silencio
y así podré soportarlo.

Me mantendré tranquilo
y esperaré como la noche,
con su vigilia de estrellas
y su cabeza inclinada en señal de paciencia.

Es seguro que vendrá la mañana,
que se desvanecerá la oscuridad
y que su voz se derramará por los cielos

en torrentes de oro.

sábado, 26 de enero de 2019

MIRANDO DE TRAVÉS

MIRANDO DE TRAVÉS

Hay muchas maneras de ver e interpretar los hechos, sean reales o ficticios, como ejemplo de ello me atrevo a traer aquí un microrrelato del escritor argentino Marco Denevi, amante de las “deconstrucciones” históricas (él las llama “falsificaciones históricas”) . En esta ocasión el cuento está centrado en la figura de otro ilustre, Miguel de Cervantes. O quizá no tanto en él como en su magnífica obra “Don Quijote de la Mancha”.


El precursor de Cervantes

Vivía en El Toboso una moza llamada Aldonza Lorenzo, hija de Lorenzo Corchelo, sastre, y de su mujer Francisca Nogales. Como hubiese leído numerosísimas novelas de estas de caballería, acabó perdiendo la razón. Se hacía llamar doña Dulcinea del Toboso, mandaba que en su presencia las gentes se arrodillasen, la tratasen de Su Grandeza y le besasen la mano. Se creía joven y hermosa, aunque tenía no menos de treinta años y las señales de la viruela en la cara. También inventó un galán, al que dio el nombre de don Quijote de la Mancha. Decía que don Quijote había partido hacia lejanos reinos en busca de aventuras, lances y peligros, al modo de Amadís de Gaula y Tirante el Blanco. Se pasaba todo el día asomada a la ventana de su casa, esperando la vuelta de su enamorado. Un hidalgüelo de los alrededores, que la amaba, pensó hacerse pasar por don Quijote. Vistió una vieja armadura, montó en un rocín y salió a los caminos a repetir las hazañas del imaginario caballero. Cuando, seguro del éxito de su ardid, volvió al Toboso, Aldonza Lorenzo había muerto de tercianas 1.

Espero que sirva de entrenamiento para meterse en la realidad y mirar desde otro perspectiva.
  1. Tercianas: Fiebre intermitente cuyos accesos se repiten cada tres días.


viernes, 25 de enero de 2019

EL VALOR DE LAS PERSONAS

EL VALOR DE LAS PERSONAS

Hay algunas personas (pocas, pero valiosísimas) que se atreven a comentar algunas de mis entradas y eso que he de confesar que no son todas agradables, asumibles ni válidas, según mi criterio, para ser tomadas en consideración.

Mi agradecimiento hacia ellas es inmenso. Son una bocanada de aire fresco en un “ir pasando” que no resulta nada fácil y también la expresión de que quedan “personas cabales” en el mundo, aunque pasen desapercibidas durante ciertos tiempos.

Me refuerzan en la idea de que la realidad, toda realidad, tiene más de una visión e interpretación y que a veces necesitamos contrastar la visión a la que nos arrastra nuestro caminar, solo para poder seguir.

Procuro ir combinando (si el tiempo y el estado personal me lo permiten) puntos de vista o temas diferentes, sobre todo para no dejar la impresión de estar sepultado por la realidad, pero parece que pesa más lo negativo, lo pesimista de mis posiciones.


Está claro que mi realidad puede ser descrita de muchas maneras. Yo me dejo llevar por una y es seguro que no se corresponde con las de esos impagables comentarios, por lo que puede ser bueno insistir en algunos de mis posicionamientos, por más que no pretenda, ni de lejos, ni justificar ni explicar nada, solo describir.

El tiempo pasa (lo hace así para todos, incluso no queriendo, por lo que ese hecho, en sí mismo, no tiene más valor que el de ser una variables interviniente que conforma parte de nuestro escenario vital). Ocurre que, al pasar el tiempo, vamos cambiando nuestra visión de lo que sucede en nuestro entorno y en nosotros mismos. 

De ese modo contemplamos y valoramos la amistad o el cariño de otra manera, buscas más el cómo son las personas, buscas y valoras la tranquilidad, quizá porque necesitas más defender tu zona de confort, te aferras hasta con los dientes de lo que tienes o te queda de vida, aprendes de un modo descarnado que nada es para siempre y quizá eso te hace valorar más lo que tienes, el momento (una imagen, un sonido, un ruido, un gesto… valen así mucho más de lo que en sí puedan significar). Aprendes, en definitiva que lo importante es cada minuto de vida, porque cada uno se convierte en el milagro que te permite ESTAR VIVO.


Solo hay una cosa difícil de conseguir: el contacto y comprensión de los demás. La certeza de que hay alguien detrás de una puerta o de una ventana que intenta mirarte.

jueves, 24 de enero de 2019

AGARRADO AL RECUERDO

AGARRADO AL RECUERDO
(Con palabras prestadas, pero sentidas)

“ ... a poco estuvo de que no, venía cansado y había perdido los caminos de tanto andar, malherido de cicatrices de corazón, venía tan sin venir que parecía rendirse de rodillas, muertas en tierras que no conocen sol.”


  Volvió a ganar el amor y aunque parecía que no, 
aunque parecía que una vida tarde
era ya tarde para el corazón,
como sin querer ella volvió un día a mirarle
y él, distraído rendido de buscarle
miró de nuevo donde ya había mirado antes.

  Del mito que hacía del amor dos mitades,
dos seres de un solo ser perdidos en las arenas del tiempo,
ecos de abrazos que parece que no por cierto, 
y siempre vuelven a encontrarse,
así ellos trenzaron sus caminos como antes,
hasta dar con el nudo de beso prieto.
  
  Y siempre la danza de los tiempos
los encontró en giros de la espiral 
que bailan como bailan los astros en sus abismos,
jugando a perderse y luego a sus pasos rimar
con la suave música que son ellos mismos
y que dan su ritmo celeste en el suspirar.


 Jacques Pierre

La foto es de Berlanga de Duero (Soria)

miércoles, 23 de enero de 2019

SOMOS APRENDICES

SOMOS APRENDICES

Fernando Savater apunta:: "Una persona libre nunca se pregunta esto que oímos siempre ¿qué va a pasar? Las personas libres tienen que preguntarse ¿qué vamos a hacer? Porque pasará lo que dejaremos que pase. Nadie vendrá a salvarnos de ninguna parte”.

Por su parte, el presidente de Apple se presentaba en la última exposición tecnológica de su compañía diciendo: “Quién soy yo?, un becario, porque en este mundo no dejaremos de serlo”.

Y si seguimos un poco la evolución y el ritmo de los avances de la tecnología, aparte de marearnos, comprobaremos que, como adelanta el último Informe de la Compañía ERICSSON , no dejaremos de ser unos NOVATOS TECNOLÓGICOS, por más que el futuro apunte al uso de lenguajes corporales, expresiones faciales, controles de voz…, esto es, hacia una nueva realidad.


No hay manera de mantenerse al día y tendremos que ir aprendiendo y olvidando a una velocidad que nos pondrá en situación de inferioridad  ante las tecnologías, hasta el punto de que no acabaremos de distinguir entre la propia máquina y el ser humano

No es extraño que Michael Björn, director de Investigación del Ericsson Consumer Lab. apunte que «Estamos entrando en un futuro en el que los dispositivos no tengan botones ni interruptores, ni necesiten estar controlados digitalmente con el smartphone. De hecho, este será un cambio necesario, pues sería difícil que las personas aprendan una nueva interfaz de usuario para cada dispositivo que se conecte al Internet de las Cosas».


Mientras tendremos que cuidar el hecho de que las redes de conexión social no acaben de desgarrar la sociedad

martes, 22 de enero de 2019

A VECES

A VECES

Por mis circunstancias, a veces puedo parecer distante, pero nunca ESTOY ausente. Puedo no escribir a alguien, pero no olvidarle y seguro que si alguno de los que “están” conmigo me necesita, podré no estar cerca, pero no abandonarle. 

A la vez he de confesar que me callo, que quedo en silencio ante algunas noticias, pero no porque no tenga argumentos, sino porque he aprendido que es mejor gozar de la paz que tener razón.

Aparte de los inconvenientes de la biología, uno sufre el paso del tiempo y ambas cosas obligan a ver la realidad o los recuerdos de una forma que antes no habías contemplado ni tomado en consideración siquiera. Por ejemplo, se aprecia más la vida porque notas con más cercanía que nada es para siempre o que el “siempre” es apenas unos meses y que pasar por ellos, aparte de dolor, es casi un milagro lograrlo.

Como decía J.L. Borges, uno aprende que :

Soy el que sabe que no es menos vano 
que el vano observador que en el espejo 
de silencio y cristal sigue el reflejo 
o el cuerpo (da lo mismo) del hermano. 

Soy, tácitos amigos, el que sabe 
que no hay otra venganza que el olvido 
ni otro perdón. Un dios ha concedido 
al odio humano esta curiosa llave. 

Soy el que pese a tan ilustres modos 
de errar, no ha descifrado el laberinto 
singular y plural, arduo y distinto, 

del tiempo, que es uno y es de todos. 
Soy el que es nadie, el que no fue una espada 

en la guerra. Soy eco, olvido, nada.

lunes, 21 de enero de 2019

ABANDONARSE

ABANDONARSE

Hay días en que uno no tiene más remedio que abandonarse, que dejar que el tiempo siga su cuenta sin que apenas se note, o, al menos, sin implicarse en él. Días en los que no importa en que haga sol o llueva, en los que no queda otro remedio que buscar en la propia soledad. Faltan las fuerzas y no queda nada a lo que agarrarse, falta orientación para enfocar el esfuerzo o falta la fuerza para ese esfuerzo.

Son días, en los que, como decía Castañeda en “El Don del Águila”:

 “Ya me di al poder que a mi destino rige. Y no me aferro ya a nada, para así no tener nada qué defender. No tengo pensamientos, para así poder ver. No temo ya a nada, para así poder acordarme de mí. Desapegado y sereno, me lanzaré más allá del Águila para ser libre.

Cuadra aquí, para salvar el silencio, un poema, que en este caso es la letra de una canción de Nicanor Parra:


CARTAS A UNA DESCONOCIDA

Cuando pasen los años, cuando pasen
los años y el aire haya cavado un foso
entre tu alma y la mía, cuando pasen los años
y yo solo sea un hombre que amó, un ser que se detuvo
un instante frente a tus labios,

un pobre hombre cansado de andar por los jardines,
¿dónde estarás tu? ¡dónde
estarás, oh hija de mis besos!
Último brindis

Lo queramos o no
solo tenemos tres alternativas:
el ayer, el presente y el mañana.

Y ni siquiera tres,
porque como dice el filósofo
el ayer es el ayer.
nos pertenece solo en el recuerdo:
a la rosa que ya se deshojó
no se le puede sacar otro pétalo.

Las cartas por jugar
son solamente dos:
el presente y el día de mañana.

Y ni siquiera dos,
porque es un hecho bien establecido 
que el presente no existe
sino en la medida en que se hace pasado
y ya pasó…,
como la juventud.

En resumidas cuentas
solo nos va quedando el mañana:
yo levanto mi copa
por ese día día que no llega nunca
pero que él es lo único

de lo que realmente disponemos.