Hay noches en las que hay que abrazarse fuerte, como hay días en los que hay que dejar que la soledad o nuestro propio espejo nos aconsejen. Hay momentos (cada vez más momentos) que hay que limpiarse las lágrimas… Pero nada de todo eso es para incitar la compasión, sino para decir que puede abandonarme todo el mundo, que mientras YO no me abandone… TODO ESTARÁ BIEN.
En ese caminar o dejarse llevar por la corriente, quisiera contar con personas que aceptaran mi forma de ser, mis errores. Aquellas vivencias que me pueden criticar, pero que me ayuden a ser mejor, a levantarme cuando los ánimos se van de viaje. O sea, necesito personas que, aún conociendo lo desastre que soy, sean capaces de seguir a mi lado, aun sabiendo que entre más tiempo pase en este proceso serán menos y que entonces habrá más momentos como los reflejados antes.
Pero busco que me acepten, solo eso, no que dejen su vida por mi.
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