Yo nunca seré de piedra.
Lloraré cuando haga falta.
Gritaré cuando haga falta.
Reiré cuando Haga falta.
Cantaré cuando haga falta.
RAFAEL ALBERTI
Es muy difícil hablar de lo que no se ha visto o juzgar sobre lo que no se ha sentido y eso mismo he echado en cara a muchas personas que se me han acercado. Cada uno sabe del dolor que carga, de lo que representa esa carga para él, de las dificultades y las luchas que tiene… Cada uno sabe, en definitiva, su propia historia de vida y esperanzas. Los juicios de valor externos no valen para nada y nadie tiene derecho a erigirse en juez de nada.
Ese razonamiento, que puede no ser válido para algunos, es vital para mi y hace buenas (porque justifican ls decisiones que he ido tomando) las palabras de ALBERT CAMUS (1953) que siguen:
“En el medio del odio me pareció que había dentro de mi un amor invencible En medio de las lágrimas me pareció que había dentro de mi una sonrisa invencible. En medio del caos me pareció que había dentro de mi una calma invencible.
Me di cuenta, a pesar de todo, que en medio de invierno había dentro de mi un verano invencible. Y eso me hace feliz. Porque no importa lo duro que el mundo empuje en mi contra, dentro de mi hay algo mejor empujando de vuelta”
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