miércoles, 15 de agosto de 2018

APABULLADOS

APABULLADOS
 Creemos que, a estas alturas, todos distinguimos bien lo que es la opinión pública de la opinión publicada, esto es, lo que preocupa y de lo que la gente habla y esas otras cosas que salen en la prensa y en la televisión.
La gente, en general, habla de los precios, los sueldos, la falta de oportunidades de trabajo, los servicios (luz, agua, teléfono, seguridad, educación), los impuestos (municipales y estatales ya que no se suelen conocer los de las Comunidades) y de los robos (presuntos robos aún) de los políticos y de la impunidad de todos ellos.
Puntualmente puede haber alguna otra cuestión, según el lugar o más centrada en el contexto, pero, curiosamente, el fútbol ha pasado a un segundo plano.
Todo ello  parece que nos ha convertido en más tristes, más pesimistas y más irascibles y, sobre todo a la hora de hablar, más tajantes, más enfadados, más contundentes, por decirlo de un modo suave.

No es extraño nada de lo dicho si se mira a los dirigentes y el estado de los partidos políticos. Todos andan a la greña y la impresión es que para los políticos es más importante eso y no el estado de los ciudadanos y de sus necesidades.
Miran o juzgan con apatía a los políticos y sus decisiones y… sin muchas esperanzas  y no es extraño, dado el mapa que se puede ver, oír, leer… En todo caso la opinión pública tiene claro (por lo que manifiestan) que los políticos no van a arreglar nada.
A estas alturas se está perdiendo la fe en los medios de opinión (opinión publicada), bajo el argumento de que todos “están comprados” Y algo de eso debe haber calado en las personas, porque antes cada uno compraba SU periódico, por ejemplo y ahora…”tanto da” uno u otro, ”todos son los mismo”, aunque digan diferentes cosas del mismo hecho.
Es una muestra más del pesimismo reinante y también de que solo importa la visión y los problemas personales…

Algo hay que hacer para que la sociedad se sienta representada y porque recobre cierta esperanza en una dirección determinada. Para empezar no estaría mal que la justicia comenzara a soltar sentencias, para que los ciudadanos dejaran parte de su pesimismo y de que los partidos dejaran de hablar de los otros sin dejar claro qué proponen (bueno, no es que no lo dejen claro es que ni lo dejan). Algo avanzaríamos. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario