martes, 28 de enero de 2020

NO NOS ENSEÑARON A SER FUERTES

Todos somos conscientes de que la vida no es fácil, que no siempre ocurre lo que esperamos, que nuestros planes se pueden desvanecer por mucho empeño que pongamos… por lo que lo más normal es que pasemos de un estado de frustración a otro.

Y esto es universal, diría yo, porque todos, en algún momento, hemos o tendremos que pasar por dificultades que nos hunden. Sí, también es cierto que la vida, a la vez, nos depara momentos y experiencias maravillosas, de esas que merecen la pena, que más parecieran regalos.

Hemos de ser “resilientes” (ser capaces de recuperarnos de cualquier adversidad) a a vez que luchadores, para afrontar esas dificultades.


Wayne W. Dear decía “la catástrofe que tanto te preocupa a menudo es menos horrible en la realidad de lo que fue en tu imaginación” y ese puede ser un buen motivo de reflexión. Otro sería el pensamiento de Marcel Pagnol: “La razón por la cual a las personas les resulta tan difícil ser felices es porque siempre recuerdan el pasado mejor de lo que fue, ven el presente peor de lo que es y piensan que el futuro es más complicado de lo que será” .

A mí me gusta especialmente este pensamiento de L.A. Paulos: “La incertidumbre es la única certeza que existe. Aprender cómo vivir con la inseguridad es la única seguridad que podemos alcanzar


La idea central está tomada de: Positivo mundo / Rincón de la psicología / Psicología y mente

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